Roger Dávila, vigilante del cementerio de Morales que el Día de la Madre dejó encerradas a varias personas y se negó a abrir la puerta, ofreció disculpas a los afectados.
Explicó que al culminar su turno a las 5:45 de la tarde revisó las instalaciones, pero no se percató de la presencia de visitantes, por lo que procedió a cerrar el cementerio y se retiró del lugar.
Roger Dávila
Vigilante del cementerio