Se llama Ramiro Dávila Pinedo tiene 68 años y señala estar cansado de los maltratos que recibe por parte de su hija, por tal motivo llegó a la comisaría de la Banda de Shilcayo para denunciarla, al parecer habría sido retirado del domicilio y tuvo que pernoctar en la calle, quedándose además sin ingerir alimentos.
Narra que al morir su esposa decidió poner su casa en alquiler por 2000 soles, dinero que supuestamente administra su hija, aun así, decidió echarlo de su casa.
Este anciano quien según su versión padece de Parkinson, dijo que mientras se encontraba en la dependencia policial llegó su hija para denunciarlo por supuesta agresión, versión que desmiente.
Tratamos de ubicar a la denunciada para conocer su versión sin resultados positivos, por lo que este medio de comunicación deja abierta la posibilidad para que brinde su descargo cuando lo crea pertinente.