Tras abandonar la iglesia del distrito de Morales, el cuerpo del docente Edwin García Pinchi, y del albañil Victor Vela Meléndez, fueron llevados al cementerio de ese distrito en medio de gran multitud de personas que acompañaron los cuerpos.
García Pinchi, era un profesor muy querido por su manera ser, una persona carismática, amable, muestra de ello es el número de amigos que llegaron a despedirle.
Un colega de trabajo que llegó desde la localidad de Achinamiza dio lectura a un texto que él escribió, denominó el último adiós a un gran maestro.
Los cuerpos de los pasajeros de la camioneta fueron sepultados simultáneamente en el cementerio de Morales.