En un ómnibus de la Policía Nacional, el gobernador regional de San Martín, Pedro Bogarín Vargas y los otros detenidos en Tarapoto y Moyobamba, fueron traslados al aeropuerto bajo estrictas medidas de seguridad. Los 8 detenidos que permanecían en las instalaciones de la policía antidrogas en Morales fueron conducidos en el bus.
Durante el traslado, el gobernador regional sindicado de liderar una organización criminal se notaba devastado y demacrado.